Ayer se inauguró la nueva estación de Cercanías de Renfe en la Puerta del Sol de Madrid, viendo las imágenes del acto de apertura de la nueva estación y de las distintas fases de su construcción he sentido cierta nostalgia y pese a los distintos inconvenientes que me encontré a lo largo de estos años de trabajo he de reconocer que añoro mi trabajo a pié de obra. Es muy gratificante pasar por las distintas obras en las que has colaborado y recordar que tu ayudaste a realizarlas, mi mujer está cansada de que cada vez que paso por una autovía que construí siempre le cuente las mismas "batallitas" y que cada blandón que sale en la calzada me duela en el alma y me recuerde que hice algo mal.
No sé si volveré a trabajar en la obra civil, pero lo que tengo claro es que si alguna vez vuelvo será para estar a pié de obra y recordar siempre lo que ayudé a construir.
